Si buscas un lugar tranquilo para consentirte, platillos sabrosos, este es el indicado. El servicio a cargo de Erick y del chef satisfizo mis caprichos, así que los recomiendo. Lo visité por primera vez hace 6 semanas y se ha convertido en mi favorito. El consumo se elevó porque bebí mucho vino.
Ya llevo tiempo recurriendo a Bamvino y no me ha decepcionado en esta sucursal como en la de Real del Monte.
El ambiente es muy tranquilo y el servicio es muy bueno, eso si, toma un poco de tiempo en servir los platillos, pero los sabores y la calidad de estos están excelentes.
Tal vez el único “pero” sería la preparación del clericot que solo en esta sucursal de Villas no me deja ponerle un diez además de la dificultad para encontrar estacionamiento dado que no cuenta con uno el establecimiento.