Visité esta taquería buscando probar sus tacos, pero lamentablemente la experiencia no fue la mejor. La comida me pareció insípida y le faltaba sabor; esperaba algo más fresco y bien sazonado. Además, la atención de la muchacha que nos atendió no fue amable, parecía estar de mal humor y con una actitud poco cordial, lo que hizo que la experiencia general fuera incómoda. El lugar está un poco sucio y tiene un ambiente sencillo, pero definitivamente se puede mejorar tanto en el sabor de la comida como en el trato al cliente
El lugar es pequeño pero hay mesas y sillas para sentarse a comer y también hay sillas para esperar si el pedido es para llevar.
Venden tacos, tlayudas y gringas, de tasajo, cecina y carnitas.
Todo está muy rico.
Pero tienen mal humor para atender, así que hay que ir dispuesto a ver malas caras, que te tuerzan la boca y que te contesten feo.
El sabor te hace volver pero por la atención si se piensa 2 veces antes de regresar.