Tirasavia en Cuauhtémoc

Tienen que mejorar los desayunos... Por ejemplo no tienen jugos o bebidas que no sea café para el desayuno... pedí jugo de naranja y que no tenían. Pero tenían toronja imagino que para los tragos y dijeron que podían sacarme uno. No entendí... Comida bien pero nada fuera del otro mundo. Musica muy alta para ser en la mañana que costaba conversar. Mejor en tiempo de comida o cena.

Sin duda un spot para ir con un date, desde que entras el lugar tiene su misterio y muy agradable, su carta de vinos amplia y buena.

Excelente comida, ambiente y calidad, pregunten por las hamburguesas ya que solo hacen seis piezas al día y valen mucho la pena al igual que la milanesa, recomiendo la Mezcalita de toronja y me encanta que es per friendly y las atenciones del chef.

Es una experiencia totalmente diferente si vas en la tarde que en la cena. En la noche la comida te la llevan fría con mala consistencia, cómo que el personal ya está cansado y de mal humor.

El mejor restaurante nuevo en la Ciudad de México. Período. No sé por dónde empezar con Tirasavia, porque hay mucho que decir al respecto, pero el aspecto más importante es la comida. Están absolutamente obsesionados con la comida y se nota. Todo su truco gira en torno a "de la granja a la mesa" y los "ingredientes orgánicos", pero la diferencia es que es auténtico. He regresado muchas veces, disfrutando del desayuno, el brunch, el almuerzo, la cena y las bebidas, y cada artículo es excelente. El menú: Es conciso y ofrece la cantidad justa de opciones para garantizar que cada plato se destaque. La cocina es claramente internacional, mezclando influencias mediterráneas y mexicanas con un toque personal del chef. Atmósfera: Tirasavia está situada en el corazón del barrio Juárez, rodeada de interesantes galerías de arte, cafés y encantadoras boutiques. El restaurante logra un equilibrio entre lo acogedor y lo elegante; no es demasiado sofisticado ni esforzarse demasiado. El ambiente es informal, pero la decoración y el estilo son claramente intencionados. Servicio: Pendiente. A pesar de ser un establecimiento pequeño con necesidades mínimas de personal, cada miembro del equipo está atento a sus necesidades. Lo más destacado es la presencia del chef Allan, que tiene una mentalidad gourmet y es accesible, y a menudo se lo ve mezclándose con los invitados. Comparte fácilmente detalles sobre el origen de los ingredientes, añadiendo un toque personal a la experiencia gastronómica. Precios: Para nada un lugar caro. Literalmente, la opción más asequible entre restaurantes geniales y de alta calidad como este.

Muy bonito, la comida muy buena y particular, el servicio muy bueno. Los precios están ok. Lo recomendaría mucho

La mejor comida que he probado en la Ciudad de México. Fui a cenar y probé cordero, pulpo, pescado y ostras. Se nota que prestan atención a cada pequeño detalle. El ambiente y la ubicación también son perfectos. El dueño es muy amable y se preocupa mucho por cada plato que sirve. Todo también es fresco y de origen licuado.

Fui con mi familia y en general fue una gran experiencia. Pedimos ostras, pulpo, cordero y todo estuvo increíble. El propietario saludó personalmente a todos y nos explicó el menú. Se nota que se preocupa por cada plato que prepara y por los pequeños detalles de cada plato.

La comida y drinks están ricos :) el platillo de cordero y couscous estaba muy dulce para mi gusto, el lugar podría estar un poco mejor cuidado pero no deja de estar a gusto :) y el servicio es muy amable

Increíble lugar para comer. Todo delicioso y los cócteles WOW.