Paninoteca en Tijuana

Mixologia deliciosa, comida muy excelente 👌🏻 👌🏻

Comida: 8,5/10 (al menos los paninis) Servicio: 2/10 Establecimiento: 7/10 Un bonito y pequeño lugar con un estilo italiano muy abierto pero acogedor, techos altos y poca iluminación que lo hacen sentir más grande a pesar de ser pequeño. He estado aquí dos veces. La primera vez el servicio no fue estelar pero sí aceptable. El panini estaba delicioso pero me pareció extraño que el acompañamiento elegido fueran patatas fritas... de una bolsa. No hay opción de cambiar por otro acompañamiento pequeño como ensalada, sopa, pasta o algo más apropiado, hay que pedir adicional. Ayer me entró el antojo y le hice otra visita. EVITE ESTE LUGAR COMO LA PESTE SI ESTÁ LLENADO. Lo que supongo que es el propietario tuvo una especie de evento y el lugar estaba lleno de amigos según la cantidad de tiempo que pasó con ese grupo grande. Terminé teniendo que esperar 20 minutos para que un camarero trajera el menú y 50 minutos para conseguir mi comida, la comida es buena, pero no "esperar 50 minutos para un panini con patatas fritas". Si tiene poco personal y hay mucha gente, advierta a los clientes en la entrada que la comida puede tener un tiempo de espera considerable, o al menos consulte con ellos de vez en cuando para disculparse por la espera. Solo vi a un camarero hacer milagros mientras atendía el bar, tomaba pedidos y traía comida mientras el dueño y otro tipo (que al final descubrí que trabaja allí cuando trajo mi cuenta) merodeaban. TLDR: comida decente, servicio pésimo, tiempos de espera ridículos, ve a otro lado.

Comida increíble, mi favorito era el sándwich de rosbif, 10/10.

Delicioso, probamos todo el menú y nos encantó , en especial la pasta de quesos

Pequeño y agradable lugar con un toque italiano moderno. Los sándwiches estaban muy buenos, la pizza no (lo siento, como italiano soy muy delicado con la masa de la pizza y simplemente no está bien. El servicio debe mejorar, con un lugar vacío y sin prisas, nos trajeron el sándwich equivocado y luego el El camarero desapareció durante media hora. Tenía muchas ganas de tomar otra copa, pero bueno, tuve que renunciar.