Recientemente visité Mariscos Guerrero y tuve una experiencia mixta. Por un lado, la campechana y las pescadillas estuvieron deliciosas, y la atención de la mesera fue impecable. Sin embargo, hubo algunos detalles que me decepcionaron. Los totopos, que esperaba fueran frescos, resultaron ser de tortilla acedada y me los cobraron, lo que me pareció extraño. Además, los nuggets no eran de la mejor calidad y el pescado frito estuvo terrible, lo que me parece un error grave para un lugar que se anuncia como marisquería.
En general, creo que Mariscos Guerrero tiene potencial, pero necesitan mejorar la calidad de algunos de sus platos y ser más transparentes con los ingredientes que utilizan. Espero que mejoren su oferta para justificar su nombre, aunque sospecho que atiende a cierto tipo de clientela sin que esto suene peyorativo, y por supuesto que a la menor oportunidad lo visitaré nuevamente.