Esperanza en Iztapalapa

No quisiera hablar mal de este lugar, pero me sucedió que hice un pedido de pambazos para una reunión y el día que fui a recoger mi pedido no lo habían hecho y pues me perjudicaron. Pues ahora también tienen deficiencia de pan, ya no hay la gran variedad de panes que solía haber, como que se enfocan más en roscas, panques, etc, etc. Se están olvidando de los panes tradicionales. En cuanto a los bolillos de $2.50 a veces son grandes, otras son más chicos, otras veces están tan delgados como un cascarón de huevo y otras están un poco más gruesecitos y no tienen una uniformidad. Los panes de dulce aparte que son más caros los reducen de tamaño y esas personas que llevan la administración se están haciendo avariciosas o para hacerle la barba a los dueños.

Muy atentos el personal y rápidos. El precio de la leche, normal. El pan 🍞 muy bien.

Excelente trato del personal, y el pan de buena calidad.

Bastante sencillo, con variedad decente de pasteles y panes. Atención buena y con pocas cosas a resaltar.

El pan tiene buen sabor y buen precio. El personal es amable. Sólo sugiero que las personas de las cajas, utilicen cubrebocas. Hace unos 2 meses me sucedió que llegué con la cajera, dejé la charola en la barra y la cajera que me atendió empezó a contar mi pan con el dedo ( poniendo el dedo en cada pan) luego envolvió cada pan en polipapel, pero uno de los panes salió volando y dio exactamente en su boca y luego cayó al suelo. La cajera solo se agachó recogió el pan y dijo riendo: "lo bueno es que no cayó en el suelo eh", entonces lo puso en el polipapel lo envolvió, lo metió a la bolsa y me lo cobró. No dije nada por que me dio miedo que la cajera me escupiera el chicle que masticaba, además se veía algo violenta.