La cafetería del Museo Franz Mayer es, sin duda, un rincón especial en el corazón de la Ciudad de México. Este espacio destaca por su atmósfera tranquila y apacible, ideal para quienes buscan relajarse y disfrutar de una pausa en medio del bullicio de la ciudad. Rodeado de la arquitectura histórica y el encantador patio del museo, el ambiente se siente acogedor y agradable, perfecto.
El café que sirve es excelente, con sabores intensos y bien seleccionados, lo que convierte cada taza en una experiencia gratificante. Además, el menú ofrece opciones de comida gourmet mexicana tradicional, respetando los sabores autóctonos con un toque de sofisticación. Las empanadas son especialmente destacables: hay opciones saladas que combinan ingredientes frescos y auténticos, y también variedades dulces que resultan en un delicioso cierre para cualquier comida o una tentación.
La combinación de comida de alta calidad, un entorno encantador y un ambiente tranquilo hace de esta cafetería un lugar perfecto para quienes buscan disfrutar
Lo recomiendo ampliamente