Yerba Santa Restaurante en Cuauhtémoc

Fuimos un domingo y no estoy segura de regresar, llegamos y nos atendieron rápido en dar la mesa, para tomarnos la orden fueron más de 10 minutos y de ahí todo empezó mal en los tiempos, llegaron como 20 personas en un grupo y el colmo fue que no tienen el tiempo de repueta para atender, nos acabaron en dar la comida después de ese grupo, ya moríamos de hambre y lo peor fue que ni al mismo tiempo nos llevaron la comida, eramos 4 y a una le llego casi cuando íbamos a terminar las demás. Nos dieron 3 cafés americanos de cortesía por el retardo. La verdad es que por el servicio prefiero el de Mérida.

Un lugar en la Cuauhtemoc que tienes que visitar, de entrada pedimos un café de olla que está delicioso, tan rico que literal no me quite a una abeja de encima 🤣 De platillo pedimos unos huevos bravos donde la combinación con el chile de pimiento morron y el queso chiapas fueron una verdadera delicia, aunque de aquí debo confesar que me quedé corta porque pensé que serían dos huevos estrellados y solo fue uno 🥹😅, posteriormente pedí unos chilaquiles en salsa de chile cascabel que estaban muy buenos están acompañados de cebolla, quedó y unas rebanadas de rábano. Para cerrar con broche de oro una bebida a base de maíz que no recuerdo su nombre en este momento 😀. Recomiendo ampliamente este lugar.

Es un lugar pequeño pero lo compensa con la comida y desayunos son excelentes tanto el sabor como la presentación...y el trato de los meseros es excelente

Hacen unos chilaquiles con salsa de chile poblano, que son mis chilaquiles favoritos de la Ciudad

Gran restaurante donde desayunamos con mi novia esta mañana. Al llegar alrededor de las 9:30 de un sábado, el restaurante estaba vacío, lo que nos sorprendió al saber lo ocupados que están los restaurantes bien calificados en estas áreas. Un pequeño menú basado en platos oaxaqueños y chiapanecos, pedimos muesli, huevos al Rescoldo y huevos Yerba Santa, además de un té y una infusión artesanal de frutos rojos. Todo estaba delicioso, muy bien presentado, el personal también fue muy atento. Recibimos una cortesía al principio, siempre apreciable y además excelente, en este caso una compota de frutos rojos. Todo por solo 528 pesos antes propina, ¡muy asequible! Te lo recomiendo mucho !

Visitamos para desayunar después de leer todas las críticas fenomenales. Es un lindo restaurante con detalles artísticos, cerca del hotel St Regis. La presentación y el ambiente estuvieron a la altura de las expectativas. Hay asientos al aire libre y en el interior con ambientes acogedores. El pan y la mermelada gratis estaban muy sabrosos. Pero, para ser honesto, la comida podría ser más cálida, especialmente para el desayuno. Las personas generalmente esperan tostadas francesas calientes, huevos y café. A los niños tampoco les gustó el yogur de las tostadas francesas. Quizás la cena sea una mejor opción. Al menos lo tacho de mi lista para la Ciudad de México.

Todo acerca de nuestra experiencia fue increíble. El personal fue atento. La comida era creativa y deliciosa. El ambiente era hermoso.

Los.platillos son originales y sabrosos.

No sé si les falte personal, pero se tardan mucho en atender, no saben quién llegó primero y quién después, se equivocan en lo que les pediste y varias cosas similares. La única cosa buena es que la comida está bien; por eso no les pongo una estrella.

¡Qué desayuno tan elegante, elegante y de alta calidad! Y absolutamente delicioso con la combinación adecuada y fresca de ingredientes. Porciones muy generosas también, así que asegúrate de tener hambre. Tienen asientos al aire libre y en el interior (delante y hacia atrás) con un gran ambiente y cómodos asientos. Si estás en la zona, esta es una parada obligada, ¡créame!