
No recomiendo en absoluto este lugar, ya que hay muchas mejores opciones con una atención mucho más amable y eficiente.
Para empezar, el servicio es pésimo. Nadie te atiende, nadie parece prestarte atención y, cuando finalmente logras que tomen tu orden, la comida tarda muchísimo en llegar.
En cuanto a la comida:
✅ Los cócteles son muy buenos y de buen tamaño.
❌ El ceviche mixto tenía un exceso de cebolla y tomate, con muy poco marisco.
❌ El pescado al mojo de ajo sabía únicamente a aceite, y estaba completamente empapado en grasa.
✅ La pasta, a pesar de ser porción media, era bastante abundante, lo cual es un punto positivo.
Mientras esperaba mi comida, noté que varias personas llegaban y nadie las atendía. Se quedaban de pie sin recibir una mesa ni una explicación sobre por qué no podían entrar.
Decidí visitar este lugar porque me dijeron que los precios eran mejores que en otros restaurantes similares, pero en realidad son iguales. No encontré ninguna ventaja que justifique volver.