Pasteleria Madrid en Cuauhtémoc

El servicio de caja, la calidad y sabor del pan son muy buenos, sin embargo tengo un gran descontento en cuanto al área de alimentos. Es la segunda vez que pido agua de jamaica y me dicen que ya no hay, pero más tarde resulta que veo a algunas meseras cargando las charolas a las mesas con vasos de agua de jamaica. ¿? Además, te sirven lo que se les pega la gana, en esta ocasión sin siquiera consultarme me trajeron un agua de guayaba que yo no ordené. Y parece que la causa de este incidente es porque la numeración de las órdenes se repite, pues resulta que había doble número 51 (mi orden) y me trajeron una torta que no era la que pedí junto al agua de guayaba que tampoco pedí. Me di cuenta de esto HASTA MEDIA HORA DESPUÉS, habiendo acabado de comer, cuando una de las meseras comenzó a buscar la orden 51, y pude observar como en la charola se encontraba una torta y un vaso de agua de jamaica. Al no responder nadie por la orden la mesera la devolvió a la barra, por lo que sospeché que se trataba de mi pedido, EL CUAL ME LO HABÍAN SERVIDO MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DE ORDENARLO. Para colmo me hizo daño. Saliendo del establecimiento, vi la charola en la barra y decidí observar el ticket de la orden, efectivamente, era mi comida y por sus métodos ineficientes y absurdos me dieron otra cosa.

Excelente sabor , precio un poco más caro que otras panaderías del rumbo,recomendable 100%

Es una panadería muy rica, icónica de la CDMX. La comida es rica y abundante, vale mucho la pena ir, es una opción diferente para turistas y rica y económica para locales. El personal es muy amable y el lugar es espacioso, definitivamente volvería a ir.

He ido a este lugar desde que soy un niño y debo decir que la comida es riquísima, si bien, los platillos ya se encuentran preparados y se calientan con un microondas no pierden para nada su sabor, es un lugar excelente para ir a comer ya que la atención es rápida y muy amable, con anterioridad se tenía que pagar y luego esperar por sus alimentos para llevarlos a su mesa pero ahora la última ocasión que asistí ahora pide uno sus alimentos y se le entrega una bandera y ya las meseras van a entregar su pedido directo a su mesa, siempre que he ido el trato ha sido muy amable y cordial el tiempo de espera es bastante limitado y la fila para pedir avanza muy rápido recomiendo este lugar ampliamente además de ser muy emblemático

Todo bien, lo único malo es que hay que pagar todo antes, no hay servicio de carta en las mesas. Hay pan, pasteles, comida, café, fruta, agua de sabores y guisados.

Nos gusto muchísimo la pastelería y también tienen una gran variedad de platos salados es ideal para desayunos,almuerzos.

Sin duda una de las pocas pastelerías que quedan en la CDMX qué conservan la esencia de las verdaderas pastelerías con ese aroma y toque de antaño, el pan más delicioso que haya probado y yo viviendo en Iztapalapa vale mucho la pena hacer el viaje en metro para admirarse de esta joya de la gastronomía en la ciudad. Felicidades!!! Soy su fan!!! 🥰😘❤️💐🍰

Servicio bueno y económico y la comida sabrosa y todo muy bien limpio recomendable

Siempre con buenas opciones de panadería, los panques Weber, los integrales, mmmh los de higos y el pan de caja, bien podrían tener sucursales...

Lo único que no es agradable son sus asientos, todo lo demás es excelente 😌 las enchiladas, una delicia, el.cafe no se diga maravilloso el pan es un manjar. FELICIDADES son un gran equipo