
Excelente.
Soy una snob del café y siempre busco lugares para descansar, escribir, crear arte, etc. cuando viajo, pequeños negocios o algún lugar donde evitar el calor, pero sin renunciar a la diversión. Esto es precisamente eso.
La dueña es muy amable, sabe inglés y prepara un café buenísimo. Usa salsas de mayor calidad para dar sabor, algo que creo que muchas cafeterías de todo el mundo a veces escatiman. Los dos shots de mi latte estaban PERFECTOS; los granos que usaron tienen un sabor un poco más intenso en lugar de oscuros y amargos; supongo que de tueste medio a medio claro.
También pedí el bagel de pollo… ¡Dios mío! Me emocioné al comerlo, la verdad. El bagel era un tipo de multigrano, con tomate, pepino y pollo a la parrilla ya preparado, con una lechuga larga. También lleva queso derretido por encima, y ofreció salsa chipotle (no muy picante) para acompañar. Pidan la salsa chipotle. Ni siquiera me gustan los tomates ni los pepinos, pero en conjunto estaba realmente perfecto.
Además, no es solo una rebanada fina de pollo a la parrilla; lo llena hasta el punto de que se cae y te permite comer trozos de pollo extra.
Unos 80 pesos por cada latte con sabor y leche alternativa, súper asequible. Creo que unos 80 dólares por el bagel.
En serio, 10/10. Estoy tomando mi segundo latte ahora mismo, mientras escribo esto.