Dulce 1810 en San Miguel de Allende

Un lugar para disfrutar tu bebida favorita. Muy

La comida, las bebidas y el lugar magníficos, muy acogedor, para una charla, ver algún partido o simplemente leer un buen libro, la música a un volumen super considerable que permite disfrutar del lugar. la atención maravillosa aunque de repente un poco distraídos.

Estuve buscando un lugar para pasar una tarde agradable, se me antojaba un buen café y un postre, ya había pasado varias veces por el lugar y decidí entrar. Pedí un pastel que estaba muy bueno y el café de gran calidad, probamos algo de la panadería y nos gustó tanto que pedimos para llevar. Tiene una gran variedad de bebidas por lo que las opciones son muchas, ultra recomendado.

Hermoso salón. Lástima que la comida no combinara con la decoración. Mi hamburguesa estaba cruda, al igual que mis papas fritas, y además tenían una capa. La rúcula de la hamburguesa se me salía de la boca, un desastre total por solo 350 pesos. El mesero estaba más preocupado por la servilleta de tela que por mi comida. Eviten las cosas bonitas aquí.