Elegimos este lugar porque en uno de los episodios sobre cocina y viajes Makłowicz lo recomendó, él estuvo aquí y recomendó ciertos platos. Si es así, decidimos comprobarlo y pedimos los platos recomendados; por supuesto, comida típica de la zona, lamentablemente no recuerdo los nombres (los teníamos guardados en el teléfono), pero diré que estaba bueno, rápido y sabroso. , aunque en lugares posteriores de México comimos platos/platos "mejores", más sabrosos, pero una cosa es segura, el lugar tiene el ambiente adecuado (o mejor dicho, no tiene aire acondicionado). Hay varias opciones diferentes para comer aquí, desde comida típica local hasta las omnipresentes pizzas y hamburguesas. Hay helados, refrescos, café y otras especialidades - "algo para todos los gustos" - vale la pena visitarlo - al lado de la salida a la izquierda está el Museo del Cacao, también es un lugar muy agradable para visitar, puedes comprar su chocolate y Algunas pequeñas baratijas allí; en general, recomiendo este lugar. Una cosa es irritante cuando entras, los revendedores en realidad están cazando para atraer al cliente a su "stand", llamando/saludando/alentando de forma bastante intrusiva, pero vale la pena dar un paseo y ver qué y quién ofrece, porque los precios son muy similar.
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