Lamentablemente, mi experiencia en su local el pasado sábado fue muy decepcionante debido a la mala atención del vendedor. En primer lugar, solicitamos amablemente que permitieran a una persona de nuestro grupo lavarse las manos, pero nos negaron esta petición de manera poco cortés. Además, la actitud de la vendedora fue completamente carente de amabilidad.
En segundo lugar, al compartir el pastel tres leches que compramos, nos sorprendió descubrir que el pastel consistía principalmente de betún, con menos de un centímetro de pan. Esto nos pareció inaceptable, ya que prácticamente nos vendieron solo betún en lugar del pastel que esperábamos.
Les sugiero que recuerden sus orígenes y el trato humilde con el que comenzaron. Al principio, sus pasteles eran mucho mejores y el servicio era mucho más atento. No permitan que la fama les haga olvidar la calidad y la atención al cliente que los hizo destacar en primer lugar.
En cuanto a regresar a comprar ahí con ustedes, lo veo poco probable.